¿Tu empresa te ha metido en un ERTE?, ¿Sabes cómo influye eso en tu declaración de la renta del próximo año? En este post te contamos todos los detalles.
Como consecuencia de la crisis sanitaria y económica que ha producido la COVID-19, muchas empresas solicitaron un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). Esto supone que los empleados han tenido, durante el año 2020, dos pagadores:
- Su empresa.
- El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). El SEPE te habrá pagado el 70% de la base reguladora que te corresponda y esa cantidad se considera rendimiento de trabajo.
Tener dos pagadores puede suceder también en aquellos casos en los que una persona tiene varios empleos o se queda en paro tras trabajar en una empresa.
¿Qué supone tener dos pagadores en la declaración de la renta?
En base a la regulación establecida en el artículo 96 de la Ley del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), tendrán que realizar la declaración de la renta aquellas personas que tengan dos o más pagadores, cuando los rendimientos del trabajo sean superiores a 14.000 euros y lo recibido del segundo y restantes pagadores sea superior a 1.500 euros.
Por lo tanto, si estás en un ERTE puede que tengas que presentar la declaración de la renta, aunque otros años no lo hayas tenido que hacer, y, además, es posible que tengas que pagar. Por otro lado, es importante que reflejes en la declaración que te has visto afectado por un ERTE.
¿Voy a tener que pagar más impuestos?
No hay una respuesta única a esta pregunta, ya que depende de varios factores:
- La cantidad total que hayas recibido por tu trabajo para los dos o más pagadores.
- Las retenciones que te hayan realizado los pagadores en las remuneraciones percibidas. En el caso del SEPE no se suelen realizar retenciones y si se hacen son mínima.
El hecho de que el SEPE no aplique retención puede suponer que muchos empleados que hayan estado o estén en un ERTE tengan que pagar más en la declaración de la renta del año que viene.
¿Qué puedo hacer para reducir el IRPF a pagar?
La solución para evitar sustos cuando elabores la declaración de la renta es que solicites a tu empresa o al SEPE que aumente la retención respecto a la cantidad que te abona, para ir pagando poco a poco y no tener que pagar todo a la vez cuando hagas la declaración del IRPF.
Además, si la declaración de la renta te da un resultado a pagar y no puedes hacer frente a ese pago tienes la opción de solicitar un aplazamiento o fraccionamiento en dos pagos. Otra opción es pagar el importe con una tarjeta de crédito y solicitar un aplazamiento al banco.
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