Seguro que nombres como Bitcoin o Ethereum no te son desconocidos… Lo que quizá no tengas tan claro es cómo es la tributación de las criptomonedas en nuestro país. Y no es de extrañar, porque hasta hace muy poco no había una regulación específica. Pero ahora contamos con el Decreto-Ley 7/2021, de 27 de abril, que transpone la normativa europea sobre prevención de blanqueo de capitales y medidas tributarias, entre otras cosas. ¿Quieres saber más sobre ella?
¿Cuál es la fiscalidad de las criptomonedas en España?
Ya en la declaración de la Renta de 2020 hay que incluir los beneficios obtenidos de la transmisión de monedas electrónicas que se hayan adquirido como inversión. Y, por lo que respecta al IRPF, tienen la misma consideración que cualquier otra ganancia patrimonial.
A efectos de fiscalidad de las criptomonedas adquiridas como inversión, es indiferente si las transacciones se han hecho en mercados extranjeros o si el monedero virtual está situado en España. Al declarar las criptomonedas hay que reseñar siempre las ganancias; no es obligatorio dejar constancia de las pérdidas, pero puede resultar interesante para que puedas compensar pérdidas y ganancias.
Además, estos activos están sujetos al Impuesto sobre el Patrimonio, y se deben declarar junto con el resto de bienes. Exactamente igual que declararías un capital en divisas tradicionales.
El Modelo 720 en la tributación de criptomonedas
Todos aquellos que tengan bienes y derechos en el extranjero, y esto incluye a los criptoactivos, deben declararlos a través del Modelo 720 si el montante total supera los 50.000 €. Si es tu caso, deberías hacerlo cada año antes de el 31 de marzo.Recuerda que hoy en día la presentación de esta declaración informativa se puede hacer de forma telemática. No hacerlo cuando se está obligado a ello puede dar lugar a sanciones de hasta 5.000 €, igual que presentarlo con datos inexactos o falsos.
Nuevas obligaciones para los servicios de custodia
La nueva normativa impone a los exchanges y servicios de custodia la obligación de identificar debidamente a las personas físicas y jurídicas que sean titulares de criptomonedas. Se debe conservar y actualizar la información relativa a la titularidad real.
Lo que se busca con esto es prevenir el blanqueo de capitales, evitando que los monederos virtuales puedan ser usados por personas que no han declarado sus ganancias y pretenden usar las criptomonedas para introducir ese dinero en el circuito legal.
Hacia un mayor control
Este año no solo han surgido cambios en lo que se refiere a la fiscalidad de las monedas electrónicas. El Plan Anual de Control Tributario y Aduanero de 2021 también establece medidas tendentes a obtener más información de las operaciones realizadas con criptomonedas, sistematizar y analizar esa información para controlar si se está tributando correctamente, y potenciar la cooperación internacional para seguir avanzando en el conocimiento de los usos de activos virtuales.
A medida que los diferentes países profundizan en la regulación de las criptodivisas, se vuelve más importante el papel a título individual el contar con una asesoría fiscal en criptomonedas. Y es que la tributación de criptomonedas es un tema complejo, que requiere de conocimientos muy especializados para evitar sanciones.
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